Construir una nueva educación.

    La educación nos pertenece a todos, niños, jóvenes, adultos y ancianos. La educación es un proceso donde los seres humanos interactúan y se traspasan diversos tipos de saberes.

     Es además una construcción cultural, la cual alberga el conocimiento, los grandes descubrimientos del hombre, costumbres e incluso la formación social.

Hoy, cuando se profundiza cada vez más el modelo mercantil en la educación, se levantan un sinfín de reivindicaciones, que si bien son legitimas, no apuntan a la transformación de los cimientos de la educación, ya que estas demandas no tienen objetivos de largo plazo, ni son reestructúrales, sólo son respuestas a los embates de las políticas privatizadoras.

     En nuestra realidad el estudiante es un consumidor, el cual en base a su poder adquisitivo puede optar a tener una educación de mayor o menor calidad.  Porque  la estrategia de quienes ostentan el poder es eliminar por completo la educación pública, por medio de la precarización,  generando jugosas ofertas de competencia de carácter privado, es cosa de ver cómo han emergido los colegios particular  subvencionados en desmedro de los colegios municipales.

Lo anterior nos demuestra como los gobiernos han ido abriendo las puertas a la educación privada en desmedro de la pública,  reproduciendo e incrementando las  interminables brechas sociales.

     Desde los sectores estudiantiles se ofrece una suerte de resistencia pasiva, que si bien medianamente hace frente a estas leyes que profundizan la educación de mercado, no son capaces de poder ponerse a la ofensiva en la lucha por la educación pública.

    La educación fuera de lo que algunos creen, tiene que ser pública, de acceso irrestricto y gratuita. Además tenemos que pasar a ser entes protagónicos de nuestro propio proceso educativo, en conjunto con los profesores y todos los actores de la educación.

     Por eso apuntamos  a una educación que debiese  ser construida por todos/as en una  retroalimentación constante, interdisciplinaria (integrando todas las disciplinas) viendo la realidad desde un punto de vista global y no parcelada como sucede  hoy.  Una educación así, es el instrumento fundamental y necesario para generar una transformación social.

Por Q.